La travesía del primer capítulo

En el primer capítulo empieza a forjarse el destino de una novela —imprenta o papelera—.

Hace unos años formé parte del jurado de un certamen de novela. El equipo de lectores previos tardó más de lo previsto en filtrar las más de cuatrocientas obras inscriptas, así que, en lugar de cuatro meses, dispusimos de escasos cuarenta y cinco días para valorar las quince novelas finalistas. Para la organización parecía un problema casi insalvable, incluso contempló la posibilidad de aplazar la fecha de comunicación del fallo, pero no fue necesario. El jurado cumplió con los plazos previstos en las bases de la convocatoria. Yo entregué mi propuesta de los cinco finalistas a los treinta días de recibir los manuscritos. (más…)